UN ARBOL DONDE TREPAR, UN JARDÍN DONDE CORRER....

En la foto mi hermana y yo con nuestra abuela paterna, la Iaia Amalia. Estamos en casa de mi tio, que tenía una panaderia/pasteleria, e ir a su casa era fiesta grande; un bonito jardín, un gran árbol por el que trepar, pasteles y chocolate... Pero nadie superaba el chocolate deshecho de la Iaia Amalia, con sus hojitas de ruda. Aún siento el sabor y recuerdo el olor..