UN ANGELOTE DE RIZOS RUBIOS

Pues si... la de la foto soy yo, esa cara de angelote y esos rizos (que desaparecieron)... pero un bichín. Ahi tendría unos dos años, cuando mi madre supo que estaba embarazada de mi hermana, y se pasó medio embarazo llorando de pensar de tener que lidiar con otro angelote como su primera hija. Trastadas miles: mis padres optaron por atar todos mis muñecos con cuerdas a los barrotes del balcón, pues me encantaba tirarlos a la calle, más de una vez subieron a casa el portero o el farmaceútico porque tiraba los platos (suerte que eran de plástico...) con restos de fruta y habían aterrizado en su cabeza, o mi madre me deja haciendo la siesta, deja la puerta de casa entreabierta y sube un segundo al vecino de arriba y a la vuelta yo me había ido, y me encuentran tres calles más allá, diciendo que había ido a comprar hielo.... y la gloriosa vez que quise imitar a los hombres de las mudanzas. En aquel tiempo había un enorme gancho en las terrazas y por ahi y con poleas y cuerdas subían los muebles y los entraban a través de los balcones. Pasaron delante de mi nariz y supongo que debí quedar impactada, porque inmediatamente cogí mi sillita y mi mesita y según me cuentan las lié con hilo de coser y las conseguí tirar por el balcón. Nadie se explica como un retaco como yo consigió tal proeza, pero si recuerdan vivamente al portero de la finca lívido en la puerta de mi casa con restos de la mesa en sus manos y murmurando... a un milímetro, me ha pasado a un milímetro. Aquel día se acabó el balcón para mí en mucho tiempo... Y una vez mi hermana en casa, suma y sigue. Yo quería dormir en la cuna como ella, y una vez conseguí sacar a mi hermana, dejarla en el suelo y tumbarme yo tan ricamente. A día de hoy he cambiado un "poco", jajajajaja, pero solo un poco... soy más alta y no tengo rizos, jajajaja y por supuesto no tiro muebles por el balcón....